lunes, 19 de noviembre de 2007

El Diablito Ignaciano


Muchos se han preguntado por qué el San Ignacio, siendo un Colegio católico, tiene como mascota al Diablito. Otros incluso se escandalizan pensando que le estamos haciendo propaganda a Satanás. El asunto es que el Diablito ignaciano nos cuestiona a tal punto que se lo ha querido reemplazar por un lobo, de los que aparecen en el escudo de Loyola, pero sin resultados.

Parece entonces conveniente dar algunos elementos sobre la historia y el sentido que tiene nuestro emblema.

El Diablito nace en los años ´60. Ya lo recordarán los alumnos de aquella época, pudiendo aportar con sus comentarios más precisiones al respecto.

Entendiendo que el dragón era la mascota del Saint George’s, porque San Jorge venció al dragón, los ignacianos de aquella época quisieron aplicar la misma lógica, adoptando el diablito como mascota del San Ignacio porque San Ignacio venció a Luzbel. Nuestro himno lo enuncia con toda claridad:

"de luzbel las legiones se ven ya marchar y sus negros pendones al sol enlutar, Compañía de Jesús corre a la lid".

De hecho, esta idea de vencer al mal, de ordenar la vida, aparece claramente como uno de los motores de la espiritualidad ignaciana, que desarrolla como pocas, la noción de combate espiritual entre el buen y el mal espíritu. Y en ese combate estamos todos, tironeados por ambos lados.

En ese sentido, el Diablito, que es una imagen domesticada de Luzbel, trae consigo al menos un par de buenas noticias.

La primera es que por muy diablos que seamos, Dios nos quiere con El, porque nos ama, porque El nos creó y en eso no se equivocó, y porque su amor es incondicional y eterno.

La segunda buena noticia es que con la ayuda de Dios podemos llegar a domesticar ese diablillo que llevamos dentro. En otras palabras, el Nachito es una forma lúdica de proclamar que con la gracia de Dios hasta el demonio puede convertirse, que Cristo venció a la muerte y al mal.

No se trata de un culto a Satanás, ni mucho menos. Es cosa de mirar la imagen en cuestión, alegre y juguetón.

El Diablito ignaciano trata más bien de realzar la fuerza salvífica de Cristo que vence el mal. Algo parecido a lo que sucede con las diabladas que le rinden culto a la Virgen en nuestros países andinos; o a las gárgolas que adornan las catedrales europeas; o al modo que tienen los mexicanos de celebrar el día de los difuntos con calaveras y esqueletos.

En vez de adoptar un animal cualquiera, nuestra mascota también nos sirve para evangelizar. Así como los que ven el dragón del Saint George’s no se aterrorizan, sino que piensan justamente en el santo que lo derrotó, los que se encuentran con el diablito ignaciano, debieran poder llegar a entender quién está detrás de esa caricatura.

Por lo demás, ese no es ni de lejos la imagen que podemos imaginar de Satanás. Para nosotros el demonio tiene el rostro que San Ignacio describe en los Ejercicios Espirituales con estas palabras:

[140] 1º punto. El primer punto es imaginar así como si se asentase el caudillo de todos los enemigos en aquel gran campo de Babilonia, como en una grande cátedra de fuego y humo, en figura horrible y espantosa.

[141] 2º punto. El 2º: considerar cómo hace llamamiento de innumerables demonios y cómo los esparce a los unos en tal ciudad y a los otros en otra, y así por todo el mundo, no dexando provincias, lugares, estados, ni personas algunas en particular.

[142] 3º punto. El 3º: considerar el sermón que les hace, y cómo los amonesta para echar redes y cadenas; que primero hayan de tentar de codicia de riquezas, como suele, ut in pluribus, para que más fácilmente vengan a vano honor del mundo, y después a crecida soberbia; de manera que el primer escalón sea de riquezas, el 2º de honor, el 3º de soberbia, y de estos tres escalones induce a todos los otros vicios.

Codicia de riquezas, vano honor del mundo y crecida soberbia. Esa es la verdadera cara del demonio, su figura horrible y espantosa, como señala San Ignacio.

Quienes fueron al último interescolar, en el que obtuvimos el tercer lugar en atletismo y el primero en la presentación en cancha, habrán identificado tales rasgos en otros lienzos y actitudes, mucho más que en el diablito "cabezón y mamón", como le dicen los niños acá.

Ahora bien, contagiados por la cultura ambiente, es cierto que los alumnos tienden a hacerlo más diabólico y a cargarlo de agresividad. Por lo cual, quizás la pelea no sea tanto cambiar la mascota sino conservar la imagen y el sentido que tiene, defendiéndola como a las demás, de las redes y cadenas que el demonio utiliza para atraer a los que desea conquistar.

Porque al final de cuentas, un pingüino, un conejo, un león, un cóndor, un vikingo o un diablito, todos pueden ser imagen de los antivalores que representan al demonio. De hecho el cine y la literatura se han valido de ellos en no pocas ocasiones para representar el mal. Si no, pregúntenle a Batman o a Esopo…


Andrés Vargas S. J.
Rector Colegio San Ignacio - El Bosque

9 comentarios:

Hugo Hanisch dijo...

Me confieso padre de haber sido el, o uno de los inventores del famoso diablito Ignaciano. Fue el año 1965 cuando apareció publicado por primera vez en contraposición a nuestro archirival dragón del Saint George.

Poco despues me tocó ser ministro de propaganda del Centro de Alumnos CASI en 1967, cuando era presidente Cristián Reitze que quiso repetirse el plato algunos años después. Ese año el diablito tomo su forma actual e hicimos la mayor difusión en carteles, poleras, diarios murales y pancartas.

Recuerdo con mucha satisfacción aquel periodo que me significó varias felicitaciones y un bravísimo artículo de Fiducia que editaba un libro en Brasil, donde aparecía como apologista de Satanás, algo bastante impropio de un colegio Jesuíta.

El artículo brasileño decía que habiamos puesto el mundo al revés al sobreponer a Luzbel sobre el SI de San Ignacio. La verdad es que toda mi generación del `68 puso el mundo un poco patas pa`arriba.

Mis padres que eran muy católicos y conservadores, terminaron por aceptar la famosa mascota aunque más de alguna vez hubo ciertas miradas de desaprobación cuando me encontraban dibujándolo. Debo creer que me habrían preferido encontrar estudiando.

El mayor respaldo estuvo en el padre José Francisco Arrau (Q.E.P.D)que me pedía a diario varias versiones del diablito para sus campañas deportivas y de acción social Creo que fué él quien realmente lo impuso como "imagen corporativa", lo que a mí me permitía capear un montón de clases a mi entera satisfaccción...

Fue tanto el éxito que el Verbo Divino se apuró en sacar su conejo para no ser menos.

Le escribo esta nota 43 años después, desde Islamabad, capital de Pakistán, donde trabajo para el Banco Mundial. No tengo claro si aquí podría dibujar algo semejante sin temor a algo más que un articulo de Fiducia...

Un gran abrazo desde estas distancias y que Dios los acompañe
siempre

José Hugo Hanisch Ovalle
6ºD 1968

Edmundo Lobo dijo...

No voy a confesarme, porque me siento orgulloso de lo que realicé para el San Ignacio.

Me ha impresionado como un inocente dibujo que hice más pensando en representar esa lúdica transgresión que todo escolar tiene hacia la disciplina escolar,sea religiosa o laica, se haya convertido en un tema tan controversial.

Entiendo las aclaraciones que hace el Rector del San Ignacio El Bosque porque siempre están los que ven la representación del mal hasta en las cosas más triviales.

Para tranquilidad de muchos les puedo decir que el tema del infierno ha sido, dentro de la Iglesia, muy discutido. Unos tienen un concepto más bien medieval y para otros, no es un lugar físico, sino un estado mental de quien sufre por haber causado daño.

Aclaro, el Diablito lo hicimos en Alonso Ovalle 3 personas en el año 65: el novicio Arrau, (hermano del padre que estaba en El Bosque) y que propuso la necesidad de tener una mascota, yo que lo concebí y dibujé, y por último una persona clave porque lo aprobó, el padre Patricio Cariola (QEPD)de quien estaré simpre agradecido por el apoyo que tuve cuando me comenzó una enfermedad que me hizo abandonar el colegio, mi querido colegio.

Les escribo desde Honduras donde resido desde hace 35 años.

Edmundo Lobo Wiehoff

PD.Si quieren cambiarlo por un lobo me sentiré igualmente halagado

Edmundo Lobo dijo...

Para quienes no saben que el papa Juan Pablo II dió por exterminado al diablo, les reproduzco la noticia que circuló hace un tiempo y que espero tranquilice a quienes tienen una visión arcaica del diablo:

"El infierno, del que se habla poco en este tiempo, existe y es eterno", dijo el Pontífice romano el pasado abril de 2007. Una idea que es contraria a lo que defendió el anterior Papa, el polaco Juan Pablo II, durante su pontificado. Juan Pablo II corrigió el concenpto tradicional del infierno, fue en verano de 1999, cuando hubo cuatro audiencias para hablar sobre el ciero , el purgatorio, el infierno y el diablo. "El cielo", dijo entonces, no es "un lugar físico entre las nubes". El infierno tampoco es "un lugar", sino "la situación de quien se aparta de Dios". El Purgatorio es un estado provisional de "purificación" que nada tiene que ver con ubicaciones terrenales. Y Satanás "está vencido: Jesús nos ha liberado de su temor".

Veamos entonces, el mal personificado en quienes causan daño a los seres humanos con el hambre, guerras, corrupción y el deterioro ambiental, entre otros flagelos que hoy nos toca presenciar.

Para terminar, quiero mencionar que quien inició la creación del Diablito fue el novicio "Pililo" Arrau, se me escapa su nombre porque el apodo se imponía sobre su nombre. Una gran persona.

Edmundo Lobo dijo...

Para quienes no saben que el papa Juan Pablo II dió por exterminado al diablo, les reproduzco la noticia que circuló hace un tiempo y que espero tranquilice a quienes tienen una visión arcaica del diablo:

"El infierno, del que se habla poco en este tiempo, existe y es eterno", dijo el Pontífice romano el pasado abril de 2007. Una idea que es contraria a lo que defendió el anterior Papa, el polaco Juan Pablo II, durante su pontificado. Juan Pablo II corrigió el concenpto tradicional del infierno, fue en verano de 1999, cuando hubo cuatro audiencias para hablar sobre el ciero , el purgatorio, el infierno y el diablo. "El cielo", dijo entonces, no es "un lugar físico entre las nubes". El infierno tampoco es "un lugar", sino "la situación de quien se aparta de Dios". El Purgatorio es un estado provisional de "purificación" que nada tiene que ver con ubicaciones terrenales. Y Satanás "está vencido: Jesús nos ha liberado de su temor".

Veamos entonces, el mal personificado en quienes causan daño a los seres humanos con el hambre, guerras, corrupción y el deterioro ambiental, entre otros flagelos que hoy nos toca presenciar.

Para terminar, quiero mencionar que quien inició la creación del Diablito fue el novicio "Pililo" Arrau, se me escapa su nombre porque el apodo se imponía sobre su nombre. Una gran persona.

Manuel Grez Ibáñez dijo...

Recuerdo que en el año 1965 estaba en 2do año de humanidades y el profesor Juan Muraro junto al futuro entrenador de atletismo del Colegio "Lobitos" nos fueron seleccionando en las clases de gimnasia a los con más aptitudes atléticas para formar el equipo de atletismo del colegio bajo la mística del entusiasta "cura" JF Arrau quien acababa de regresar de EEUU con pioneras ideas de estimular el deporte en los jóvenes estudiantes ignacianos. De aquella época recuerdo los nombres de los velocistas como Felipe Cáceres, Lucho Ibáñez, Pato Rossel, el "gringo"Alan Peet, el atlético Pedro Kromschöder, la dupla de fondistas Juanito Sabbagh con Enrique Zenteno que después de los 1000 mts llegaban desfallecientes a la meta, los lanzadores Oscar Delanoy y Nicolas Velasco, en salto estaba Adolfo Illanes y el garrochista Pablo Navarro entre los muchos que fuimos los pioneros del atletismo en el colegio.Recuerdo perfectamente a Hugo que como hábil dibujante que diseñó y creó "el mentado diablito" bajo la asesoría de JF Arrau. El año 1967 fue presidente del recién formado CASI Andrés Korysma y apareció el ESEÍ, el periódico del colegio, con las caricaturas del diablito. Siguiendo el ejemplo de Hugo, el año 69 también fui ministro de Cultura en la presidencia del CASI de Daniel Del Río. Recuerdo aquella época de estudiante como la más feliz de mi vida en que estábamos sumidos en la burbuja del colegio sin grandes necesidades ni angustias y compitiendo en buena lid en los campeonatos interescolares defendiendo las banderas donde el diablito estaba dibujado , en contra de los otros colegios, sin hacernos mayores cuestionamientos filosóficos sobre esta simpática caricatura, como los que se han planteado anteriormente.
Manuel Antonio Grez Ibáñez Ignaciano 6to D 1969

Manuel Grez Ibáñez dijo...

Al rememorar los felices tiempos que viví como joven atleta del colegio,ahora que ya soy abuelo y de la tercera edad he mencionado al pasar en mi anterior comentario a un personaje que hoy aprecio y valoro en gran manera que con su callada enseñanza y ejemplo me preparó sin saberlo para las diferentes experiencias de la vida que debería vencer, ahora ya no en una pista atlética y al cual rindo un homenaje porque creo que es un gran olvidado. Se trata del ex entrenador de atletismo de nuestro colegio don Mario Lobos.
De estatura mediana, delgado, moreno, corto pelo negro, de cortas uñas de las manos con polvo blanco por una onicocriptosis crónica que nunca pudo tratar,con un cromómetro colgando del cuello y otro en la mano derecha, afable, de pocas palabras, casi inexpresivo, vestido con una simple camisa, pantalón plomo y zapatos negros de cuero, a diferencia de los otros entrenadores que vestía a la usanza "gringa" con modernos buzos, zapatillas y joquey con largas viceras,
don "Mario" , como lo llamaban los atletas mayores del club Atlético Santiago , a quienes también entrenaba en la cancha y pista del colegio mostraba su bajo perfil e hizo con el cura Arrau una dupla de oro que formó y sacó adelante hasta alcanzar los primeros lugares en los campeonatos interescolares lo que sería nuestro equipo atlético del colegio.Trabajador constante llegaba de los primeros al estadio, tocándome en una época participar de un plan de entrenamiento que comenzaba en la madrugada, debiendo entrenar duro antes de iniciar las clases, a las que llegábamos recién duchados"y como nuevos" de los camarines y en las tardes ,después de entrenar a los alumnos de los dos colegios,(el de arriba y el de abajo)seguía entrenado hasta la noche a los del Atlético Santiago.Don Mario me enseñó a través de atletismo que nada en la vida se consigue si no es con un trabajo constante, esforzado,sacrificado realizado con tesón y entrega y que os éxitos se van logrando en la medida del trabajo realizado, que la derrota no existe al no lograr una meta deseada, sino que solo es un incentivo para levantase y seguir perseverando y que los triunfos y medallas cosechadas solo se reciben en la medida de lo que antes sembramos, en un ambiente sano donde no se fumaba ni se bebía alcohol para poder rendir más en las pistas importando la superación personal.Aprendiendo a trabajar y participar en equipo recibiendo la experiencia de los que saben más y entregándola a los que saben menos.Valiosa experiencia adquirida para luego aplicarla en las difícil carrera por la vida y la existencia.
Es por esto que desde mi escritorio y frente a mi PC hoy le rindo a don Mario o "Lobitos" un sincero y emotivo homenaje donde quiera que se encuentre.

Loro Bravo dijo...

El diablito está triste, este miércoles 5 de agosto ha muerto su creador Edmundo Lobo Wiehoff
Ex alumno de San Ignacio Alonso Ovalle, quien lo creó durante 1963, pasando paulatinamente a formar parte de la historia de ambos colegios, que en ese tiempo, tenían la mayoría de sus actividades en conjunto.
El mismo Edmundo, atleta, futbolista, pintor, cantante, gran lider Scout creó también, en la misma época, el característico “SI” estilizado que nos representa hasta hoy. Este fue publicado por primera vez ese mismo año en la vitrina de los Scout de Alonso Ovalle ubicada en el inolvidable corredor del juego de “Tablita”.
Toda esta historia quedó plasmada en el anuario de 2016 de SIAO, entrevistado durante su visita al colegio al regreso de sus más de 40 años en Honduras.
Ahí, como también en algunas intervenciones anteriores en este mismo espacio, dió su explicación de lo que representa el diablito.
Adiós querido amigo.
Ricardo Bravo L.
Ex Alumno generación ‘66
SIAO.

Unknown dijo...

Feicitaciones al o a los cradores del diablito.
Orlando "Topo" Lagos, ex alumno y egresado en 1970

Anónimo dijo...

Mis felicitaciones a todos, Rafael Zuñiga ( el Rata ), ex alumno SIEB, promoción 1972, ex arquero selección Fútbol( DT Óscar Chico Solinas ) y ex.atleta en periodo Cura Arrau y señor Mario Lobos